domingo, 17 de julio de 2011

De cómo podría haber sido una semana perfecta y maravillosa y no lo fue...

Estaba todo planificado como para que fuese una semana estupenda, y revitalizante, como un buen comienzo de vacaciones. Pero no lo fue, por qué?
Siempre planifico todo en mi agenda, porque sino es típico que no alcanzo a hacer todo lo que quisiera hacer o no lo logro.
La semana empezó de la mejor manera: pasando el ramo que tenía pendiente: Laboral II, aquel maldito ramo que me hizo sufrir tanto el año pasado. Y para celebrar ese acontecimiento nos reunimos con un grupo de amigos en el Bravíssimo, la pasamos genial riéndonos de todo, como siempre, así como dice el comercial de tv 'despreocupados'...
Y siguió aún mejor: el martes ya de vacaciones, retorné a casa, al sur, con mi familia. Estando en casa ya, podría descansar y recuperar ánimos para el segundo semestre en la universidad.
Hasta ahí todo bien, pero el jueves empezó la tortura gratuita. Me perdí la visita a Chile de The Asteroids Galaxy Tour, no es una de mis bandas favoritas, pero me encanta su música, y hubiese sido genial poder verlos en vivo.
Ayer, sábado, debería haber sido la celebración que estábamos preparando en la pastoral salesiana, para celebrar un paso importante dento de la experiencia a la que pertenezco, aquel paso lo daríamos con mi hermano. Pero por un montón de 'peros' no pudimos celebrarlo ayer. Cosa que me tiene muy molesta, ya que por dicha experiencia he trabajado más de 10 años.
Y hoy, para terminar, la eliminación de Chile en Copa América. Si bien no soy fanática del fútbol sudaméricano, siempre veo todo lo que puedo ver de fútbol internacional y apoyar a la selección nacional, aunque odie a su entrenador, nunca está de más. Finalmente, Chile perdió con Venezuela, el país que normalmente queda último en las clasificatorias. Se despide de la Copa como ya lo habían hecho Argentina y Brasil. Lo único bueno, es que no sufrimos viendo alargues ni penales fallidos.
Sé que hay gente que dirá, pero ya fue, no te quedes en el pasado o no te quedes con la amargura, y si, puede que tengan razón. Pero imaginar la semana de otra forma y sabiendo que podía haber sido mejor, no me pone muy feliz que digamos.
Siento que mi semana empezó como avión y terminó como en una carreta xDD

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