miércoles, 6 de abril de 2011

Con el paso del tiempo he descubierto que pocas veces uno elige su carrera, es ella la que te elige a tí. Muchas veces me he preguntado qué hago estudiando psicología, si acaso es la carrera indicada para mí... Creo que todos pasamos por esas etapas de incertidumbre.
A mí ya no me preocupa mucho, sobretodo porque me he dado cuenta que psicología no es una carrera para estudiar cuando apenas tienes 17/18 años, cuando apenas sabes lo que es la vida, es una carrera que sienta mejor en gente que ya a probado distintas cosas en la vida, por ejemplo, que sabe lo que es trabajar, que sabe lo que es pagar cuentas, que sabe lo que es vivir solo...
Claro, porque sino cómo ayudas al otro? si no sabes nada de la vida, sigues viviendo con tus padres y es tu primer empleo? Las personas que te escuchan, confiarían en tu criterio y tus palabras?
Lo otro es que hay personas a las que simplemente carreras como esta o filosofía les quedan grandes para sus pequeñas mentes, es decir, la forma en que procesan la información del mundo no es adecuada para este tipo de carreras. Por ejemplo alguien que tienen un pensamiento más lógico y líneal como un ingeniero, no entendería los enredos y las vueltas que hay para explicar cosas de manera psicológica por ejemplo. Un empresario o comerciante, estaría más preocupado del producto, de la eficiencia y eficacia de la empresa y no se enfoca en cómo se siente el cliente, si se siente cómodo con nosotros, le interesaría más el n° de clientes que hay y si acaso puedo atender más. Así sucesivamente.
Nuestras mentes trabajan de manera distinta, así algunos estamos capacitados para hacer unas cosas y otras no. Por eso sé que no sirvo para calcular cuántas toneladas de concreto se necesitan para reparar el puente sobre el Río Claro.

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